Corona Dorada nace de la búsqueda de una actividad productiva que permitiera generar impacto social, económico y ambiental. Este emprendimiento busca involucrar asociaciones de productores y otras instituciones locales como son los colegios, universidades, gobiernos locales, en el ámbito principalmente rural.

La propuesta productiva/comercial se articula en una cadena de valor que promueve la participación y la distribución justa de la renta que se genere de la actividad, en este caso apícola. Bajo la premisa de generar bienestar de manera sostenible, se buscan actores especializados con quienes se comparte la visión, con total transparencia. Una vez que se llega a un acuerdo de lo que se desea lograr, se les integra entonces a la gestión de la cadena. De esta forma, los productores, las organizaciones productivas, la municipalidad, las agencias de gobierno, los fabricantes de equipos, los proveedores de productos relacionados y hasta los clientes/compradores se van integrando de manera orgánica. Todos con un mismo propósito de aportar a la construcción de un mundo mejor.

El modelo se basa en la premisa de que los emprendimientos deben generar bienestar social, económico y ambiental para un número cada vez mayor de personas, sin destruir ningún valor en el proceso. Si esto a su vez, se sustenta en la aplicación de principios y valores universales como la justicia, la reciprocidad, la transparencia, la pureza de intención, la unidad y otros, operamos entonces bajo un marco conceptual que permite articular y potenciar las capacidades de todos los involucrados. Partimos del paradigma de la abundancia y no de la escasez; donde todos los recursos están disponibles y, lo que se requiere, es iniciar procesos de diálogo, consulta y articulación, según un proceso continuo de construcción, aprendizaje e innovación.

“Vivimos hoy en un período único en la historia. A medida que la humanidad emerge de la infancia y se acerca a su madurez colectiva, la necesidad de una nueva comprensión de las relaciones entre el individuo, la comunidad y las instituciones de la sociedad se hace cada vez más apremiante…”

“Aceptar que el individuo, la comunidad y las instituciones de la sociedad son los protagonistas de la construcción de la civilización, y actuar en consecuencia, abre grandes posibilidades para la felicidad humana y permite la creación de entornos en los que los verdaderos poderes del espíritu humano puedan ser liberados.”

Fuente: https://www.bahai.org/es/beliefs/essential-relationships/individual-society/